En nuestros viajes, nos gusta pasar la noche al aire libre. Esto nos permite elegir libremente el lugar y la hora, lo que por un lado ofrece flexibilidad, pero en la mayoría de los casos simplemente nos proporciona lugares hermosos y únicos donde pasar la noche.
Puede que una casa en ruinas no sea elegante, pero a veces es un lugar «interesante» para pasar la noche. Aún más bonito, por supuesto, es un campo abierto, al borde del cual extendemos nuestros sacos de dormir bajo un viejo roble. Escuchar el viento que sopla entre las copas de los árboles. A la mañana siguiente nos despiertan los cálidos rayos del sol que se cuelan entre la hierba de la pradera.
Aunque un largo viaje lluvioso nos ha mostrado el lado oscuro del Motor, con la humedad y el frío penetrando ya hasta la última capa, no nos impide buscar refugio al aire libre. A menudo encontrábamos un refugio en el bosque, completamente empapados y a oscuras, y podíamos calentar cuerpo y alma alrededor de una crepitante hoguera.
Sin embargo, la forma más bella de vivac suele encontrarse en una cumbre. Un campamento nocturno a 4.500 metros en los Andes ofrece un cielo estrellado incomparable, que también nos reconforta por encima del tiritante frío. Si no quiere viajar tan lejos, puede probar la Cime de la Bonette a casi 3.000 metros en los Alpes franceses. Aquí, una panorámica de 360° espera a ser admirada y fotografiada.
Además de los momentos, en su mayoría muy bellos, del mundo vegetal y geográfico, también hay, por supuesto, encuentros con animales una y otra vez. Aunque una tarántula se posó en mi Bolsa de equipaje cuando me desperté por la mañana en Perú, este tipo de sorpresas desagradables siguen siendo la excepción más que la regla. Los jabalíes suelen ser muy curiosos, pero hasta ahora siempre han mantenido las distancias. En Francia, nos despertó por la noche en un gran prado un caballo blanco que pastaba tranquilamente junto a nuestras cabezas. Sin embargo, lo más frecuente era que a la mañana siguiente nos recibiera el balido de cabras u ovejas , que en el fondo son pacíficos camaradas. Todo lo contrario que los molestos perros callejeros que se pueden encontrar en todos los rincones del mundo y que suelen aparecer en mitad de la noche para robarle el sueño.
Estos encuentros no deseados forman parte de la visión del mundo. Si quieres ir a Canadá, puedes esperar encontrarte con osos , pero probablemente no tendrás que preocuparte tanto de que te sorprendan excursionistas, curiosos o propietarios por la noche.
El factor humano es probablemente el más difícil de calcular para los vivacs. Sin embargo, hemos tenido muchos encuentros hermosos con la gente de este mundo: En Francia, tras una noche empapados en un refugio en el bosque, ya estábamos provistos de cruasanes . El simpático francés condujo hasta el siguiente albergue para endulzarnos la mañana con «Pain au Chocolat».
No obstante, intentamos elegir nuestro lugar para dormir lo más desapercibido posible y alejado de las aglomeraciones humanas. Ni queremos ofender a nadie, ni queremos que nos molesten a nosotros. Aunque hay excepciones, los encuentros con otras personas son casi siempre amistosos e interesantes. A estas alturas ya hemos desarrollado unos instintos bastante buenos que suelen conseguirnos una plaza excelente en el «hotel de las mil estrellas » y al mismo tiempo garantizan paz y recogimiento.
En caso de encuentro con un alma humana, el lema es: ¡sonríe y saluda! La risa suele ser correspondida, aunque no se hable el idioma local. Por supuesto, también es útil no haber talado dos árboles para el campamento de antemano y haber distribuido las latas de bebida en un amplio radio alrededor del campamento. Ni que decir tiene que dejamos el menor rastro posible.
Estos encuentros no deseados forman parte de la visión del mundo. Si quieres ir a Canadá, puedes esperar encontrarte con osos , pero probablemente no tendrás que preocuparte tanto de que te sorprendan excursionistas, curiosos o propietarios por la noche.
El factor humano es probablemente el más difícil de calcular para los vivacs. Ya hemos tenido muchos encuentros hermosos con personas de este mundo e incluso nos han suministrado cruasanes en Francia tras una noche empapados en un refugio en el bosque. El amable hombre se tomó media hora de viaje para endulzarnos la mañana con «Pain au Chocolat». No obstante, intentamos elegir nuestro lugar para dormir lo más desapercibido posible y alejado de las aglomeraciones humanas. Ni queremos ofender a nadie, ni queremos que nos molesten a nosotros. Aunque hay excepciones, los encuentros con otras personas son casi siempre amistosos e interesantes. A estas alturas ya hemos desarrollado unos instintos bastante buenos que suelen conseguirnos una plaza excelente en el «hotel de las mil estrellas » y al mismo tiempo garantizan paz y recogimiento.
En caso de encuentro con un alma humana, el lema es: ¡sonríe y saluda! La risa suele ser correspondida, aunque no se hable el idioma local. Por supuesto, también es útil no haber talado dos árboles para el campamento de antemano y haber distribuido las latas de bebida en un amplio radio alrededor del campamento. Ni que decir tiene que dejamos el menor rastro posible.
Acerca de la tecnología
La versión más sencilla de nuestro vivac es una lona en el suelo. A continuación, una estera de dormir (opcional), saco de dormir – listo. El dosel del cielo sirve de tienda de campaña:
Si no hace suficiente frío, no hay viento o no hay suficiente altitud, a menudo tenemos que desempaquetar la mosquitera para protegernos de las picaduras u otras molestias. Basta con colocar una Motocicleta a izquierda y derecha de la lona, echar una red por encima y listo. La red también ayuda en cierta medida contra las orugas cerca del suelo. Puede obtener una breve visión de ►
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Si ya está lloviendo o hay amenaza de humedad por la noche, se coloca una lona sobre las motos (si es necesario, simplemente sobre la mosquitera) y se apuntala. Así estarás protegido del rocío o la lluvia desde arriba, pero seguirás teniendo una visión clara del campo. Hay que reconocerlo: No se puede sobrevivir indemne a varias horas de lluvia intensa bajo tierra.
Con esta tecnología, hemos encontrado la forma óptima de viajar para nosotros. No necesitamos una tienda voluminosa y el campamento se monta y desmonta en unos minutos. Por supuesto, esto significa que no hay ningún lugar al que retirarse, lo que puede ser muy importante, sobre todo cuando se viaja durante varios meses por regiones desconocidas. Dormir sin tienda en un camping tampoco es una opción. Estamos expuestos al clima, la naturaleza, la tierra y la gente sin una capa intermedia protectora (principalmente psicológica) de tejido tenso. Comparable al propio motociclismo: Una experiencia, a menudo fuera de la zona de confort.
Equipo
Hemos elaborado una lista con nuestros utensilios de viaje más importantes:
Lista de equipaje ultraligero – TransEuroTrail
Esta es nuestra lista definitiva de equipaje
